La alimentación es elemento básico en el crecimiento de los niños y las niñas. Gracias a una nutrición equilibrada éstos pueden desarrollar la fortaleza que les permitirá enfrentar los inevitables embates de la enfermedad a lo largo de su vida. La alimentación adecuada también les hace capaces de desarrollar su potencial psicomotor y así tener herramientas propias para poder ser dueños de su futuro.
Entendemos la alimentación infantil, además de como un derecho, como una herramienta que permitirá un pleno desarrollo cognitivo y emocional y como consecuencia un buen desarrollo escolar.